Cuando se trata de color de cabello, existe una gran variedad. Desde tonos rubios naturales hasta verde neón. Sin embargo, hay mucho más en un color de cabello de lo que se ve a simple vista. Además del tono o la marca, los tipos de tintes para cabello están disponibles en diferentes niveles de permeabilidad, como permanente o semipermanente. Esto ofrece la libertad de decidir si hacer un cambio permanente o experimentar con nuevos looks sin mucho compromiso.

Permanente

El tinte permanente para el cabello está diseñado para personas que están interesadas ​​en resultados duraderos. Para lograr estos resultados, el amoníaco y el peróxido de hidrógeno trabajan al unísono para penetrar la cutícula del cabello. Esto permite que se deposite el color.

Se puede utilizar tanto para aclarar como para oscurecer el tono de tus mechones. Por lo general, un tinte para el cabello permanente dura alrededor de seis a ocho semanas antes de que sea necesario renovarlo debido a la decoloración.

Además, el color deberá volver a aplicarse al nuevo crecimiento en las raíces cada cuatro semanas. Este tipo de coloración de cabello funciona excepcionalmente bien para cubrir canas y es el tipo de servicio de color más común y solicitado en los salones, aunque requiere el mayor mantenimiento y es el más dañino.

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Semi-permanente

Los tintes de cabello semipermanente, a diferencia de las variedades permanentes, no está diseñado para durar. No contienen amoníaco ni peróxido de hidrógeno y no son capaces de aclarar el color del cabello.

Esto significa que no pueden aclarar el cabello y tampoco pueden oscurecerlo drásticamente. En muchos casos, los tipos de tintes para cabello semipermanentes se utilizan para agregar brillo al cabello natural o para revivir el cabello previamente teñido entre retoques.

El tiempo que dura el color semipermanente varía según la marca y el tono. No obstante, la mayoría están diseñados para desaparecer después de 6 a 12 lavados.

Demipermanente

A primera vista, se podría suponer que los términos semipermanente y demipermanente podrían usarse indistintamente. Pero, los dos son bastante diferentes en términos de composición.

La diferencia más notable es que los colores demipermanentes contienen pequeñas cantidades de peróxido. El nivel de peróxido es drásticamente menor que el de los tintes de cabello permanentes y no hay amoníaco, como ocurre con un color semipermanente.

La adición de peróxido significa que los colores demipermanentes pueden abrir la cutícula del cabello para que se absorba el color. El resultado de estos tipos de tintes para cabello es un tono más rico que es más suave para el cabello que uno permanente con resultados que duran hasta 24 lavados.